El 2018 se nos presenta como el año más determinante en la historia contemporánea para los venezolanos. Es una afirmación desafiante dado todo lo que nos ha tocado vivir y afrontar en los últimos 20 años, pero la posibilidad de la realización de las elecciones presidenciales en Venezuela, así como en otros países de la región, traerán consigo cambios en el entorno geopolítico, un reacomodo en las relaciones internacionales y por supuesto, nuevos protagonistas y nuevas formas de hacer la política exterior.
Veamos el panorama mundial. En febrero será la primera vuelta presidencial en Costa Rica para elegir al sucesor de Luis Guillermo Solís. De acuerdo a las últimas encuestas, el candidato del partido de Liberación Nacional, Antonio Álvarez, lidera la intención de voto con un 30% sobre Juan Diego Castro del partido Integración Nacional. Álvarez ha sido solidario en su posición acerca de Venezuela, de hecho, cuenta con el apoyo del ex presidente Óscar Arias de quién todos conocemos su postura sobre nuestro país.
En el mes de abril habrá dos elecciones, una en Latinoamérica, específicamente en Paraguay y otra, en Rusia. En esta última nación, todo parece indicar que en primera vuelta se impondrá Vladímir Putin en unas elecciones altamente cuestionadas por el control de los medios y el apoyo gubernamental. De ganar Putin, cumpliría 22 años en la presidencia, sin contar los cuatro en que fue el primer ministro de Dmiti Medvédev. Con este resultado, Nicolás Maduro mantendría un importante aliado en el contexto geopolítico.
En Paraguay, se elegirá al sucesor de Horacio Cartes quien ha sido implacable contra el régimen. Hasta el momento hay dos candidatos, Mario Abdo Benítez del Partido Colorado, quien además es disidente del ala de Horacio Cartes y Efraín Alegre, del Partido Liberal Radical Auténtico. Ambos candidatos han manifestado posturas condenatorias a las violaciones de derechos humanos en Venezuela, con lo que se presume que la política exterior de este país hacia el régimen se mantendrá igual.
En el mes de mayo habrá primera vuelta de elecciones presidenciales en Colombia. El panorama aquí es mucho más complicado y lo analizaremos profundamente en su momento sin embargo, para la fecha existe una importante dispersión en torno a las preferencias de los votantes y aún se trabaja en las alianzas que podrían cambiar los resultados y más, cuando están en puerta las elecciones legislativas del 11 de marzo.
Hasta el momento, las preferencias se inclinan por el ex alcalde de Medellín, Sergio Fajardo, Germán Vargas Lleras e Iván Duque. En cualquier caso, el tema Venezuela es y será clave para la campaña puesto que la inmigración venezolana y la situación fronteriza son vitales y esenciales para los colombianos. En una encuesta realizada por la revista SEMANA durante el mes de diciembre, los resultados a dos interrogantes diferentes arrojaron que el 60% de la población está de acuerdo con que el nuevo gobierno acoja a los venezolanos y por otra parte, que el 59,4% de los encuestados rechaza que su país siga el mismo modelo.
Entrando en el segundo semestre del 2018 habrá otra elección complicada, las presidenciales en México. El candidato del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés López Obrador, lidera todas las encuestas frente a sus rivales de la alianza del PRI y ante el candidato del PAN, Ricardo Anaya. López Obrador ha manifestado varias veces que no comparte con el régimen de Nicolás Maduro sin embargo, ha sido cuestionado muchas veces por su comportamiento timorato hacia la violación de derechos humanos en Venezuela. Las críticas internas lo catalogan de populista e incluso, de ser permisivo con comportamientos de intención totalitaria. Lo que si está claro es que de ganar López Obrador, cambiara la política exterior hacia Venezuela argumentando la doctrina de no intervención y quizá, sea menos relevante de lo que ha sido hasta ahora gracias al desempeño de su actual canciller Luis Videgaray.
Finalmente, en Octubre se realizarán las elecciones presidenciales en Brasil, en donde Lula da Silva lidera todas las encuestas a pesar de sus acusaciones de corrupción. Lula fue un socio comercial y político de Hugo Chávez y sigue manifestando su apoyo a la llamada “revolución bolivariana”. El 24 de enero el Tribunal Regional Federal en Porto Alegre analizará si su apelación a la condena de 9 años de prisión emitida por el juez Sergio Moro por el caso Lava Jato, es admitida. Lula corre el riesgo de ser encarcelado y no participar en las elecciones, de lo contrario, podría correr y allí el panorama se complicaría para las distintas alianzas. Es muy pronto para determinar un resultado, aunque para ese momento muchas cosas deben estar definidas en Venezuela.
Como vemos hay una influencia directa de Venezuela en la región. Los cambios geopolíticos marcaran los apoyos o alejamientos a Maduro quien hoy tiene un alto rechazo en la región y en el mundo libre.
Si bien son importantes los apoyos, el discurso interno de la oposición debe ser coherente con las acciones y debe estar enfocado en salir del régimen este mismo año. De no hacerlo, se corre el riesgo de la perpetuidad en el poder de un estado forajido aumentado con ello el peligro que implica para la región, más narcotráfico y una inmigración desatada.
Elaborado por @ManuelAvendano
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